martes, 30 de marzo de 2010

GRIS, GRIS


Nos han vuelto a engañar. Anunciaron soles para final de la semana, pero cuando todo el mundo ha hecho ya sus reservas, empiezan a hablar abiertamente de un segundo frente que traerá frío, lluvia y grises. Eso sí, el tiempo mejorará a partir del lunes, con la vuelta al trabajo. La particular ley de Murphy de la meteorología junta isobaras en vacaciones y las separa después, para que dé más rabia.
Por ahí andas, por los barrancos levantinos a pleno sol, cargando energías para lo que venga. Yo te espero para huir de los capirotes. Llevaremos provisiones de torrijas y limonada para debajo del paraguas. En alguna parte coincidiremos el calorcito, tú y yo, aunque sea en otra vida.

jueves, 25 de marzo de 2010

BLANCO Y NEGRO

Con El Hereje me estoy pegando buenas sesiones de lectura. Es un libro cuyos paisajes urbanos imagino en blanco y negro, y cuyos campos imagino amarillos, naranjas, albaricoques al atardecer, dice Delibes a veces.

Cuando era pequeño pensaba que Portugal también era amarilla porque así venía pintada en el mapa de mi clase. Amarilla y sin apenas carreteras. Castilla tenía rectas las líneas de los caminos y poca densidad de poblaciones. No era como Galicia o las Vascongadas, llenas de topónimos que casi no cabían y parecían nombres de familias todos ellos.

Blanco y negro sin grises, síes y noes sin dudas, ceros y unos sin decimales, arquitectura digital. O se es o no se es. Igual que tú, también tengo ancestros castellanos, Ávila, Zamora, pueblos amarillos en los mapas de mi recuerdo, a lo sumo albaricoques al atardecer, pueblos de espigas secas pobladas de perdices, quizá. No sé. Lo que sí creo saber es que yo no soy hijo de Castilla, no quiero serlo, pensar en ello me hace sudar y me deja los pies fríos a la vez. Quiero ser hijo adoptivo del Levante de mi infancia, que me refrescaba con su mar y sus arroces al aire libre.

Quizá necesite un viaje al azahar de los naranjos, ahora en flor, para calmar mi desasosiego. Mostrarte las terrazas repletas de caracoles escondidos y respirar la humedad de la hoja verde lima del árbol que más quiero, contigo.


miércoles, 24 de marzo de 2010

Buscando imágenes de trenes de alta velocidad, me he encontrado con ésta, que es mucho más significativa. Así es la vida, señores. He estado dos días metida en trenes y autobuses y el tiempo ha pasado lento y muy rápido a la vez. En Barcelona intuí que la línea azul que se veía a lo lejos era el mar. Las curvas hacia el Tibidabo me estropearon la acogida estomacal que bien se hubiera merecido un estupendo cava, lo mejor del viaje. Castigada y sin postre volví al AVE rodeada de directorespegadosasuordenador que no recuerdan el verbo delegar, o confiar, como tú me apuntaste. La confianza está en horas bajas.
No he hecho otra cosa que ser transportada de un lado a otro, pero estoy machacada como si hubiera corrido. Así es la vida.
La primavera se impone. También entre nosotros.

miércoles, 17 de marzo de 2010

PERFILES

Estamos retratados sin saberlo desde que nacemos. Desde que la fotografía se popularizó de forma imparable ya nadie está liberado de recuerdos. Hay cámaras por todas partes. Hace menos de diez años, en África, sacabas una cámara y se montaba un revuelo importante; ahora ya está todo el mundo acostumbrado.

Por eso lo único verdaderamente espontáneo es fotografíar bebés, cosas y animales. Como mucho.

Hacemos fotos de recuerdo constantemente. ¿por qué necesitamos retratarnos todo el rato?

Sólo quiero hacer una sesión a solas, sin decorados. Buscando el primer término, sin fondos que distraigan. Espero que sea pronto.

viernes, 12 de marzo de 2010

Lo leí mientras cumplía los quince años y me dejó un gran interrogante en la cabeza. Una interrogación que picaba por nueva. Era "El disputado voto del señor Cayo". Nunca más lo volví a leer hasta hace poco, como quien dice ayer mismo.

Porque fue como quien dice ayer cuando me contaste toda su prosa con una mirada. "Es el mejor", me dijiste mientras parabas tu mirada azul y amarilla en mi, pequeño aprendiz de todo.

Nunca antes te sentí tan segura. Pensé que era amor lo que tenías con Delibes. Un amor fiel, como antes se era fiel. O como siempre se ha sido fiel, sin traicionar la palabra, transitando otras cosas pero llevando muy dentro la certeza. Leyendo sin perder el norte.

Y hoy, al leer del matrimonio del escritor con su mujer -cuyos detalles no conocía- me he estremecido. Todo el peso de un maridaje con los sentidos, con el idioma, con las querencias, se me ha apoderado durante un instante. Viva Delibes.

jueves, 11 de marzo de 2010

Don Bernardo hizo notar que una criatura de meses, siendo varón, debería mostrarse más duro y resistente y, a renglón seguido, se quedó mirando la airosa figura de la muchacha con el niño en brazos y dijo algo que a don Néstor Maluenda hubiera sorprendido: -¿Cómo es posible, hija mía, que con esa cara tan bella y ese cuerpo tan esbelto os dediquéis a una tarea tan prosaica como la de amamantar a una criatura?

('El hereje', Miguel Delibes)

He encontrado una carta de amor dentro del libro. Me ha dado alegría y rubor, pero dice esencialmente lo mismo... lo mismo que ahora diría.

miércoles, 10 de marzo de 2010

Escribo sumergido en Bolaño, atrapado por las mil y pico páginas de 2666. México llama. Me tomaría cualquier porquería picante, carne de cerdo o de gallo pelón, condimentada a muerte con agave o con chile de árbol. Por ambientarme.

Archimboldi será un cantamañanas -o quizá sería mejor llamarle cantamañanitas- pero, como se dice en el libro, México es un país de machos que siempre ha estado lleno de maricones. Me impresiona el machismo que destila todo lo que voy sabiendo del país. ¿Será verdad o es una visión idiotamente europea del asunto?

Afortunadamente allí nos acompañarán mexicanos y mexicanas de verdad.
Tengo sueño. El cansancio me lastra este miércoles sin chicha ni limoná, o quizá sea al revés. Ayer me reí mucho, pero hoy arrastro falta de descanso y las horas pasan lentas y rápidas a la vez. El otro día decíamos que según y cómo, la vida está sobrevalorada. También hay miércoles que están de más. De todas formas, voy a comprar un cupón de los ciegos, no vaya a ser hoy el día y me pille a por uvas.

martes, 2 de marzo de 2010

El minihuracán trajo vientos del sur calentitos. Aún no se me ha quitado el invierno, pero he tenido una tregua de sol, de mar, de verde y de risas. Es verdad que Asturias nos recibe siempre con brisas y cielo despejado. Colgaré a mi alrededor las fotos con las flores, los prados y las olas para no olvidar que otro paisaje ya es posible. Mientras mi corazón espera en casa otro pequeño, insignificante, nimio y pasajero milagro de la primavera, retengo en la memoria la sidra y el arroz con bogavante. Y la música. Y todos juntos.

lunes, 1 de marzo de 2010

FITOS Y FOTOS



Ya se sabe que el primer mar del año es como la primera leche de la madre: calostro para el ánimo. En Asturias sale el sol cuando vamos y eso no hay predicción que lo arruine. Es así y punto.
Luego vienen las cervezas y el rock&roll, otro tipo de calostros. Recuerdo las pantallas de leds que llevaba Fito y la entrada me pareció barata. Y gracias a Miri y Ajandro por ser como son.
El agua del Cantábrico me congeló los pies pero me calentó el corazón. Pom pom, pom pom...