lunes, 18 de marzo de 2013

La vida rural




La vida rural no me deja tiempo para explicarla. Es como si te absorbiera un agujero negro de quehaceres diarios: acarrear leña, organizar el exterior de la casa, vaciar la chimenea de cenizas, encender el fuego, asomarse a la ventana al norte y decidir la actividad inmediata. No hay manera de sentarse tranquilo a contar las cosas; se hacen y ya está.

Habría que cambiar el título del blog y llamarlo "Cositas de Madrid" porque es cuando estoy en la capital cuando realmente me paro a pensar que me están pasando cosas en Soria. He cambiado mi padrón y me acucian los plazos para plantar el huerto y poner en marcha el gallinero. Vuelvo a mi casa madrileña y vivo pensando en lo que se queda en Soria. Estoy deseando volver.

Si en Los Llamosos me encontráis preguntadme por el blog. Ya os lo cuento de viva voz. Presencialmente.